Mediante la investigación artística en la región Andino-Amazónica, este proyecto establece un diálogo inter-epistémico con filosofías espaciales de comunidades ancestrales, para así explorar el territorio como un asunto de volúmenes y entramados de vida que se extienden a lo largo de un eje vertical de ocupación y resistencia, sobre y bajo el suelo. Este proceso permite ver, indagar y documentar a través de cartografías cinemáticas las relaciones altitudinales que producen territorios verticales.